¿Mudarse a otro país con niños?
Es emocionante pero al mismo tiempo desafiante. Una mezcla de sentimientos y el gran miedo de hacerle daño a los más pequeños...
Con Nico, mi esposo, estamos convencidos de que las herramientas que le vamos a dar a nuestra hija Justi (el idioma, la experiencia, conocer nuevas culturas, hacer nuevos amigos...) superan esos miedos. Sabemos que no hay receta mágica, pero siempre priorizamos explicarle todo a Justi y desde el diálogo construimos aprendizajes hermosos. Aunque pasamos momentos muy difíciles, ella siempre entendió y se adaptó con una gran sonrisa.
Hoy estamos ante un gran desafío y no tengo todas las respuestas...
Veníamos muy bien, eligiendo con alegría qué juguetes llevamos y cuáles regalamos. Mediante el juego fue una tarea divertida.
Pero, mamá se equivocó (lejos de ser perfecta) y cuando vaciaron su habitación, Justi sufrió la tristeza del desapego, acompañado del miedo de lo que está por venir. Por suerte papá estaba ahí para contenerla y acompañarla..
No hay receta mágica ni perfecta, cada uno responde de manera diferente.
Creo que la clave es acompañarnos, darnos nuestros tiempos y permitirnos expresar lo que sentimos.
¿Ustedes qué opinan?